Ni un minuto más.

Ciertas mañanas me levanto en plan de guerra. Me enfrento a mis metas con la necesidad de que pronto se cumplan, y me hago otra vez la misma pregunta; ¿Porqué las cosas no suceden a veces cuando quiero que sucedan?
No encuentro respuestas y conjeturo: Será que hay que esperar como dice un gran amigo mio, "La alineación planetaria"? O como tantas veces digo, "Los dioses conspiran en mi contra"
No me levanto negativa, no es eso, pero lo cierto es que necesito buscar una explicación a ésta duda que me surge y la única que encuentro es que me defino un tanto impaciente, ansiosa... ¿Un tanto?. Bueno muy. Cuando me propongo algo necesito que sea ya y no dentro de unos días o unos años, sino yaaaaa...
No puedo esperar ni un minuto más...
Soy así, no puedo esperar, me exaspero,me pongo inquieta y me aburro.
Si, me aburro. Así fue que no tenía más de cinco años de edad y mi mamá me apodó "La niña de los 5 minutos" Todo me duraba 5 minutos y tras abandonar todo juego decía,
estoy aburrida...
Sí, eso mismo me sucede ahora de grande, me aburro, y en la espera, de tanto aburrirme entretejo ideas, hipótesis de lo que será y pudiera suceder, entonces desespero ante el deseo o la incertidumbre...
De tanto aburrirme...Busco cambios, giro mi destino, desarmo lo armado y rearmo para innovar.
Necesito de lo nuevo, de lo diverso que me saque del lugar de espera.
He llegado a pensar que estoy un tanto loca, pero lo que pido que sea ya, no son locuras sino aquellas pequeñas cosas que le dan sentido a mi presente y que me dejan ver un poco de mi futuro. Ese para el cual no ambiciono ni más ni menos que lo concreto, lo real y lo taaan esperado...Es por ello que lo quiero yaaaaaaaaaaaaaaa!!!!

No por nada soy Eneatipo numero 7

"Personas que buscan múltiples opciones y futuros positivos. Pueden ser polifacéticos, afirmadores y generosos. Enfermos pueden ser narcisistas, escapistas e insaciables."

Maestras en vacaciones...( solo para entendidas)

Existe un club...
Su sede es pequeña. Sus integrantes escasos. Sólo basta ver la foto y contarlos o mejor dicho contarlas. Si,las cuatro que se observan...
Yo soy la socia fundadora, la precursora, la pionera, la osada...Mis discípulas me siguieron y se unieron por convicción...y también por osadía...
El motivo, el propósito, queda reservado bajo el anonimato, pero no se reserva el derecho a admisión... Toda valiente que se atreva puede pasar por la experiencia, les damos la plena seguridad que formar parte de este club reconforta y hasta da placer...

Testamentaria

No tuve la posibilidad de elegir. Así me nutrí al llegar a mi adultez. Me encontré tan frágil que al mínimo golpe quebré...
Si hubiese podido elegir, todo aquello podría haber pasado por mi como algo superfluo, efímero...Pero no, no soy ni insensible, ni fría, ni objetiva.
Primaria y pulsional, me encontré atesorando y acumulando en mi interior un gran número de aquellas cosas que alguna vez di.
Frente a tanta debilidad e indiferencia, mi elasticidad con la que suelo regresar, me permitió nuevamente crear un envoltorio.
Fui guardando, cerrando, reprimiendo.
Confundidas entre lo auténtico y lo falso, se fueron acoplando a otras tantas cosas prestadas; girones de atención, retazos de pasión, discontinuos gestos, palabras, besos...Caricias robadas, abandonadas, y unos cuantos y astillados cuidados, envueltos en promesas de destinatarios y remitentes sin dirección...
Desatada en batalla, pretendí ganar espacios. Confronte la razón con el corazón, teniendo como desenlace victorias y heridas...
Mis sentimientos que tantas veces brillaron, entraron en el ocultamiento forzado, sin más opción.
Desdibujé la línea del borde, condimentando la realidad con mis fantasías...
Exploré, socavé, intenté, deliré, exploté, evité, restringí, escapé y regresé.
Acá estoy, buscando más que consumir.




Tu amor me enseña a vivir.
Tu amor me enseña a sentir.

Dedicado al chico del poster, quien libera mi interior...
Quien en medio de la lluvia me hizo ver el sol...

En la profundidad de mis pensamientos (solo para entendidas)

Mientras lo hacia, mis pensamientos divagaban intentando hallar una explicación.¿Por qué? ¿Habré tomado el equivocado?
No me detuve y seguí con la tarea, pese a que comenzaba a enfurecerme. Pensé incesablemente una y otra vez...
Fue una tarde en la que dediqué un tiempo a mí, mientras mi amiga me relataba las últimas novedades, yo indagaba en mis ideas...
¡Será posible! No me gusta que me sucedan estas cosas.¿Por qué? Una y otra vez...
Odio que se me reseque el esmalte de uñas!

Para La Luz...